lunes, agosto 11, 2008

Una Noche de Perros

Hugh Laurie es un hombre polifacético de múltiples talentos. Aunque su faceta más destacada es la de actor, primero como cómico británico en series como Blackadder o A Bit of Fry and Laurie, y posteriormente el papel que le ha dado fama mundial, el médico borde y adicto a las pastillas Gregory House, Hugh Laurie también es músico (toca varios instrumentos y tiene una banda) y escritor. Una Noche de Perros (The Gun Seller) es su primera y por ahora única novela, un debut que sólo se puede calificar de excelente.

Thomas Lang es un ex-militar que un buen día recibe una propuesta inesperada: asesinar al ejecutivo norteamericano Alexander Woolf a cambio de una cuantiosa suma de dinero. Lang se niega rotundamente, y decide acudir al domicilio Woolf para advertirle del peligro que corre: craso error. En el momento en el que casi mata al guardaespaldas de Woolf por error y conoce a la sensual pero peligrosa Sarah Woolf, hija de Alexander, su vida empezará a girar por derroteros de lo más insospechados, que lo llevarán a formar parte de una conspiración terrorista que tiene como único propósito el enriquicimiento con la venta de armas.

Laurie nos presenta una historia enmarcada dentro del género de espías, una trama llena de giros, situaciones inesperadas, terribles conspiraciones y hombres corruptos, chicas guapas, motos y muchísimo humor.

Una historia que en ocasiones se torna algo confusa por la gran cantidad de personajes que están involucrados, pero que Laurie nos presenta con un lenguaje ameno y asequible, pendiente en todo momento de que el lector entienda cada detalle, cosa que es de agradecer porque es fácil perderse con tanto dato de gobiernos, grupos terroristas, armas, etc.

Hugh Laurie

El punto fuerte de esta novela es sin duda el humor que rezuma, cualquiera que sea fan de House se dará cuenta de que el protagonista, Thomas Lang, es un personaje muy parecido (esta novela fue escrita unos cuantos años antes, por lo que ambos personajes seguro tienen mucho de Laurie), sobre todo en lo que respecta a su ingenio, su mirada cínica hacia todo, su sempiterno tono sarcástico y su manía por ponerle motes a todo el mundo. El libro, además, está escrito en primera persona por lo que es muy sencillo ponerle la cara de Laurie a Lang, y la de Stephen Fry a Solomon.
-Por favor, ¿qué sabe usted de Alexander Woolf? -O'Neal se inclinó hacia delante con los antebrazos sobre la mesa, y atisbé un reloj de oro. Demasiado dorado para ser oro.
-¿Cuál de ellos?
Frunció el entrecejo.
-¿Qué quiere decir con "cuál de ellos"? ¿A cuántos Alexander Woolf conoce?
Moví los labios mientras contaba en silencio.
-Cinco.
Suspiró, irritado. Vamos, muchacho, tranquilízate.
-El Alexander Woolf al que me refiero -explicó con ese tono particular de sarcástica pedantería que cualquier inglés detrás de una mesa termina por introducir en algún momento - tiene una casa en Lyall Street, Belgravia.
-Lyall Street. Por supuesto. Vaya, vaya. Entonces, seis.
O'Neal miró a Solomon, pero no encontró ninguna ayuda por ese lado. Se volvió hacia mí con una sonrisa siniestra.
-Le pregunto, señor Lang, qué sabe de él.
-Tiena una casa en Lyall Street, Belgravia. ¿Le sirve de ayuda?
Un libro entretenidísimo, que hará las delicias de cualquier fan de House o de Laurie, o simplemente de cualquiera que quiera pasar un rato divertido con un buen libro de espías, y que confirma que realmente Hugh Laurie es un hombre con un increíble talento para todo lo que hace, personalmente estoy deseando que se anime a escribir algún libro más.

Como curiosidad, tras escribir esta novela, Laurie la presentó de forma anónima, y no fue hasta que tuvo el visto bueno para ser publicada, y sólo porque su agente se lo recomendó, que Laurie decidió firmar con su propio nombre.

Nota: 8

2 comentarios:

Dianika dijo...

Vaya, interesante, no sabia nada de que fuera tambien escritor. Muy gracioso el fragmento ^_^ si que tiene talento este hombre.

hidefan dijo...

Si es que a este hombre se le da bien todo, su mujer debe estar muy contenta xD