Peach Girl #3

Pobre Momo, la de bullying que sufre en este tomo, y es que tiene que ser duro que toda la clase te de la espalda, te insulte y te haga perrerías y encima por culpa de otra persona. Aún así Momo es muy fuerte, a mí me pasa eso y me muero.

Kairi es un amor, lo enamorado que está de Momo y todo lo que hace para que ella sea feliz, aunque sea sin él. Ojalá todos los tíos fueran así, la verdad.

Tôji por fin parece que se va dando cuenta de cómo es en realidad Sae. ¡Ya era hora! Aunque con lo tontito que es, seguro que termina por engañarlo otra vez tarde o temprano. Pero bueno, al menos en este tomo demuestra que tiene sangre en sus venas y al fin hace algo por su chica.

Genial como entre Tôji y Kairi desenmascaran a Sae.

Los extras del tomo me encantan, esas historias de Saes que existen en la vida real son divertidísimas. Me encanta cuando la autora a la hora de dibujar a una amiga de Momo acaba recurriendo siempre a Kairi travestido.

Jo, qué adictivo y qué mono es este manga. Me encanta.

Peach Girl #2

Hay que ver lo mucho que me engancha este manga, ¡y es que es un culebrón! Y a mí me encantan los culebrones, claro.

Leyendo este tomo decidí que mi pareja favorita era Momo/Tôji, lo cual significa que voy a sufrir mucho porque Tôji es un imbécil y un novio pésimo que no sé da cuenta que debería apoyar a su chica antes que a la bruja de Sae.

Sae me da mucha rabia porque es que encima todo el mundo la cree, y eso es lo que más odio en este tipo de personajes (ahora, la tipa anima el manga que no veas). Me iba leyendo este tomo por los ferrocariles y me estaba poniendo negra entre las putadas de Sae y el bobo del Toji creyendo todo lo que le cuenta ella y desconfiando de Momo, cuando tendría que ser al revés. Kairi es majísimo, la verdad es que se merece que Momo esté con él en vez de con Tôji (aunque ya ves, entonces Sae seguiría metiendo cizaña, aunque Kairi no es tan tonto), pero qué le vamos a hacer, me gusta la parejita que hacen Momo y Tôji.

Pobre Momo, la que le espera todavía. Kairi sigue siendo un cielo aunque en este tomo se le escapa algo que se tenía que haber callado, claro que tampoco es algo como para que Tôji reaccionase así porque fue mucho peor que lo que hizo él... Hombres.

Los extras también son geniales, madre mía la de Saes que hay por el mundo.

Aish, me encanta.

Diez negritos

Diez Negritos probablemente sea de las obras más populares de la reina de la intriga Agatha Christie, si no la más popular. Con un ingenioso argumento lleno de giros y trampas, este libro ha servido de inspiración a multitud de obras modernas, tanto películas como libros.

Un gran misterio rodea a la Isla del Negro. Desde que un millonario excéntrico decidió venderla a petición de una de sus mujeres, multitud de rumores surgieron acerca de la verdadera identidad del nuevo dueño, un tal Mr. Owen que nadie conoce personalmente.

Ocho personas son invitadas personalmente por Mr. Owen a la Isla del Negro, cada una bajo un motivo. Una vez en la isla, descubren que ellos ocho más los dos criados que están a su servicio en la mansión del señor Owen parecen ser los únicos seres vivos en la isla, ya que Owen y señora no aparecen por ningún lado.

En su primera noche en la isla del Negro, y tras una opípara cena, una siniestra voz aparece de la nada y acusa a todos y cada uno de los presentes de ser culpables de un terrible crímen. Tras eso, uno a uno comienzan a morir.

Diez negritos se fueron a cenar. Uno se ahogó y quedaron: nueve.
Nueve negritos trasnocharon mucho. Uno no se despertó y quedaron: ocho.
Ocho negritos viajaron por Devon. Uno se escapó y quedaron: siete.
Siete negritos cortaron leña con un hacha. Uno se cortó en dos y quedaron: seis.

Diez Negritos es una auténtica obra maestra del género de la intriga. Agatha Christie es una auténtica maestra en este género en el que se desenvuelve como pez en el agua y Diez Negritos seguramente sea la mayor expresión de ello.

Seis negritos jugaron con una colmena. A uno de ellos lo picó una abeja y quedaron: cinco.
Cinco negritos estudiaron derecho. Uno de ellos se doctoró y quedaron: cuatro.
Cuatro negritos se hicieron a la mar. Un arenque rojo se tragó a uno y quedaron: tres.

La manera en la que Christie desarrolla la historia es sencillamente magistral; uno a uno de los personajes van muriendo, todos sospechan de todos cuando se dan cuenta que ellos son los únicos que parecen estar en la isla, y las sospechas se van reduciendo a medida que van quedando menos vivos.

Tres negritos se pasearon por el Zoo. Un oso los atacó y quedaron: dos.
Dos negritos estaban sentados al sol. Uno de ellos se quemó y quedó: uno.
Un negrito se encontraba solo. Y se ahorcó, y no quedó ¡ninguno!

A esto le sumamos el pasado de los personajes, de cómo todos niegan categóricamente ser culpables de los crimenes de los que se acusa y de cómo vamos averiguando lo que realmente pasó.

De telón de fondo tenemos a una canción infantil que refleja fielmente los terribles hechos sucedidos en la isla del Negro.

Como siempre Christie se las apaña para liar la madeja de forma que sea harto difícil adivinar quién es el asesino; de tres novelas que llevo leídas de ella, todavía no lo he acertado ni una sola vez. Desde luego, este libro tiene uno de los finales más originales y audaces de las novelas de estas características. Sólo a Agatha Christie se le podría haber ocurrido algo así.

Identidad (2003), una de las muchas películas inspiradas en Diez Negritos

En definitiva, una novela entretenidísima que nos mantendrá con los ojos pegados y sin querer dejar de leer hasta descubrir al verdadero culpable. Una verdadera delicia para los fans de este género literario.

Nota: 9