LA AVENTURA DEL CÍRCULO ROJO
Una casera acude a Holmes porque está muy mosqueada con su nuevo inquilino, un hombre que le pagó generosamente por la habitación pero al que no ha vuelto a ver desde que le entregó las llaves, y que se muestra excesivamente esquivo y misterioso. A Holmes le intriga lo suficiente para investigar, y más cuando empieza a sospechar que a la mujer pueden haberle dado el cambiazo y la persona que está en la habitación no es la misma que se la alquiló.
En varios relatos ya se nota que Doyle recicla elementos de otras historias y este es básicamente un refrito de El valle del terror solo que con mafias italianas de por medio. Está bien, sin más.
LA AVENTURA DEL SOLDADO DE LA PIEL DESCOLORIDA
Un soldado acude a Sherlock para que le ayude a saber qué le ha pasado a un amigo suyo de la guerra, con el que perdió el contacto de forma repentina. Tras ir a visitar a sus padres, que se mostraban muy esquivos al respecto del paradero de su hijo, lo vio a través de la ventana de la habitación en la que se hospedaba, y le llamó la atención lo descolorido de su semblante, por lo que espera que el detective le pueda echar una mano en averiguar la verdad.
Esta historia tiene una particularidad: ¡está narrada por el propio Holmes! Él mismo reconoce que no tiene tanto arte a la hora de explicar los hechos como su Watson, con el que está un poco enfadadillo porque se ha ido otra vez a vivir con una esposa, jaja. El misterio en sí no es nada del otro mundo y Sherlock tampoco hace mucho, simplemente hace una deducción y a partir de ahí se las apaña para ayudar a todo el mundo involucrado en la historia. El final es muy bonito.
LA AVENTURA DE LOS TRES FRONTONES
La viuda de un antiguo cliente de Holmes le consulta acerca de algo extraño que le ha pasado: le han hecho una oferta para comprarle su casa, una oferta muy generosa, pero con una condición: la venta incluye todos los efectos personajes de la vivienda. Holmes, al que precisamente han amenazado para que se aleje de este caso, deduce que la supuesta compra no es más que un ardid para hacerse con algo en concreto, y al saber que la mujer había recibido hacía muy poco los objetos personales de su hijo recién fallecido, tiene claro que ahí tiene que estar el quid de la cuestión.
Otra historia en la que Holmes tampoco hace mucho, solo deduce un par de cosas pero tampoco es que tenga mucho poder para cambiar las cosas tal y como están. No es de las más destacables del detective, aunque siempre está bien cuando el antagonista resulta ser una mujer.
LA AVENTURA DE LA PIEDRA DE MAZARINO
Holmes tiene el encargo de recuperar la valiosa piedra de Mazarino, una joya de incalculable valor que ha sido robada a la Corona. El detective ya tiene localizados a los malhechores, lo único que le falta es saber dónde esconden la piedra, y para ello, qué mejor que traer al enemigo a casa para sonsacárselo.
Esta historia se concibió como una obra de teatro, razón por la que está escrita en tercera persona y toda la acción se desarrolla en al salón de Baker Street. Casi toda la historia se basa en el diálogo entre Sherlock y su rival (Watson sale muy poquito, por desgracia), y Doyle recicla aquí también algunas partes de otras historias como la de la Sebastian Moran con todo lo del muñeco. Está chula, pero sin el toque personal de Watson no es lo mismo.
LA AVENTURA DEL HOMBRE QUE SE ARRASTRABA
El ayudante del profesor Pressbury, un eminente científico, acude a Holmes ya que el profesor (pronto su suegro además) está muy raro de un tiempo a esta parte. Se lo encuentran arrastrándose por los pasillos a altas horas de la noche, su perro le ladra e intenta morderlo, aparece asomado a ventanas de un segundo piso... Todo esto después de un misterioso viaje del que no quiso dar detalles y de mostrarse muy esquivo cuando le preguntan acerca de ello. Holmes y Watson se ponen manos a la obra y hacen un asombroso descubrimiento.
Este es el último relato (cronológicamente) narrado por Watson, y nos encontramos con un thriller médico que podría haber escrito perfectamente Robin Cook o Preston y Child. Bastante inverosímil, pero para relato funciona fenomenal.
LA AVENTURA DE LA MELENA DE LEÓN
Holmes ya se ha retirado y vive una pacífica existencia en una casita cerca del mar en Sussex, donde se dedica a sus estudios y a la crianza de abejas. Un día, pero, un profesor que trabaja en la escuela vecina muere en extrañas circunstancias, con Sherlock como testigo. El hombre tiene la espalda al rojo vivo, como si le hubieran azotado brutalmente con un látigo. Holmes decide investigar tan extraño asunto y ya tiene varios sospechosos en mente por los que empezar.
El segundo relato que narra el propio Holmes, que ya parece haberle cogido el tranquillo a eso de escribir acerca de sus casos. Busqué en google la apariencia del asesino y ya digo que si antes le tenía respeto al océano, ahora me entran ganas de no volver a poner el pie en el mar nunca más, jaja.
EL ÚLTIMO SALUDO
Y con esta historia de espías alemanes y Holmes saliendo de su retiro para hacer un importante trabajo para el Gobierno nos despedimos ya del detective para siempre, o al menos escrito por la mano de Conan Doyle. Este relato se dice que está narrado por Mycroft y en él solo vemos los frutos de dos años de trabajo del detective. Lo que me llamó mucho la atención es que la historia tiene lugar en 1914, relativamente moderna para la idea que tenemos del detective victoriano.
Ha sido un viaje largo, tremendamente disfrutable, al que llego con una sensación agridulce al no tener ya más que leer después de todos los ratos de compañía que me ha dado en estos últimos años. La última conversación entre Holmes y Watson me sacó la lagrimilla, no lo voy a negar.